Según publicaciones internacionales, el recientemente nombrado como futuro nuevo Embajador de los Estados Unidos en Paraguay, Gabriel Escobar, fue destituido de su anterior cargo como subsecretario adjunto de la Oficina de Asuntos Europeos y Euroasiáticos, luego de ser acusado de aparentes conflictos de intereses en el marco de su intervención en el extenso conflicto entre Kosovo y Serbia.
Dichas acusaciones provienen de una investigación realizada y publicada por el portal web británico The Frontliner UK, siendo el periodista responsable de esta Vudi Xhymshiti. Este señala en una extensa nota del portal hecha pública el pasado mes de marzo, que Escobar habría sufrido señalamientos por acciones «tendenciosas» en su labor como interviniente en el conflicto dentro de Kosovo, desde donde debía asumir una posición neutral.
La publicación del medio inglés afirma que habrían existido, según las sospechas, supuestos vínculos financieros entre la esposa del por entonces subsecretario adjunto y el Ministerio de Asuntos Exteriores de Serbia, las cuales en su momento habrían desatado dudas sobre la neutralidad e imparcialidad de Escobar en su carácter de enviado internacional.
Esto último sobre todo en lo referente a los acontecimientos diplomáticos críticos recientes en la zona, tales como la crisis de junio-agosto de 2023 en la región norteña de Mirovica, y el intento de anexión en el norte de Kosovo por parte de fuerzas paramilitares respaldadas por Serbia.
Por otro lado, a finales de diciembre del 2019, la misma publicación Frontliner UK, ya había hecho público un contrato legal entre el bufete McGinnis Lochridge LLP y el Gobierno de la República Srpska, el cual estipulaba pagos mensuales de 80.000 dólares al mismo y a sus abogados por asesorar y representar a la mencionada República en asuntos jurídicos internacionales.
Este contrato habría puesto de relieve la conexión familiar entre Manuel Escobar, socio del bufete legal, con el propio Gabriel Escobar, próximo a convertirse en el Embajador estadounidense en Paraguay en reemplazo del polémico Marc Ostfield, y estas coincidencias también se habrían considerado como motivos de posibles suspicacias en el papel diplomático, que en ese momento el entonces subsecretario adjunto debía ejercer entre Kosovo y Serbia.
Desde Frontliner UK se señaló en ese momento que la sospecha de presuntos vínculos de la familia de Escobar tanto con las autoridades serbias como incluso con el Kremlin, el cual apoya a los serbios en su conflicto de más de 15 años con Kosovo, debían ser objeto de investigaciones exhaustivas, ya que podrían hablar de una posible «agenda oculta» y de una «integridad comprometida».
El periodista mencionaba en su nota que conversó con las autoridades diplomáticas norteamericanas, a las cuales consultó por la situación de Escobar, asegurando recibir respuestas mayormente evasivas a su entender.
Finalmente, luego de estas acusaciones y dudas, curiosamente el pasado 5 de mayo de 2024 se informó sobre el relevamiento de Gabriel Escobar de sus funciones en los Balcanes Occidentales.
