Un Tribunal de Sentencia condenó a 2 años de prisión, más 2 años y 6 meses de prohibición de ejercer la profesión a la odontóloga Lilia Graciela Espinoza y 2 años de cárcel a la química Farmacéutica Sandra Hermosa.
Ambas sentenciadas por el homicidio culposo de la joven Sol Chávez, quien murió tras recetarle su odontóloga 2 gramos de flúor por 14 días. Con respecto a Hermosa, no se aplica la prohibición de ejercer la profesión.
María Edith Franco, mamá de Sol Chávez cuestionó duramente el fallo, mientras otros miembros de la familia reaccionaron de forma airada contra las condenadas al finalizar el juicio.
María Edith lo midió como una «injusticia» la resolución de los jueces. Afirmó que «no cree en el pedido de perdón» a su familia por parte de las condenadas. «Justicia de mierda es la que tenemos en este país», exclamó María Edith.
«La justicia en Paraguay es una burla. Se probó la negligencia, pero acá le quitaron la vida a mi hija», agregó la madre de Sol.
Sostuvo que los magistrados se burlaron de ella y de su familia. Adelantó que van a apelar el fallo. «Le pagué millones a ella y me devolvió a mi hija en un cajón», apuntó indignada.
Igualmente, responsabilizó a los magistrados de lo que le llegue a pasar a su esposo, quien se encuentra en estado delicado por un problema cardíaco.
Cabe recordar que la fiscal Teresita Sánchez había pedido 5 años de cárcel y 5 años de inhabilitación para ejercer la profesión tanto para Lilia Graciela Espinoza como la química farmacéutica Sandra Hermosa.