El presidente de la República Santiago Peña anunció la compra de radares de largo alcance con el objetivo de fortalecer la vigilancia del espacio aéreo.
El jefe de Estado aseguró que con esta adquisición se da un paso importante hacia la modernización en seguridad nacional.
Peña admitió que Paraguay no tenía radares que le permitieran controlar lo que sucedía en el aire, es decir no disponía de elementos para proteger su espacio aéreo, y con ello, la criminalidad «tenía arco libre», afirmó.
«Este Gobierno en vez de quedar en palabras pasa a la acción y he tomado la decisión que nadie antes de había animado, cambiar esta realidad y hacer respetar por fin el soberano espacio aéreo paraguayo», exteriorizó.
En ese contexto, el presidente dijo que este esfuerzo no es una iniciativa aislada, sino que forma parte de un plan integral y sistémico de revitalizar las fuerzas de seguridad que incluye la compra de seis aviones modernos militares Super Tucano, la incorporación de cuatro helicópteros donados por la República de China (Taiwán) y la reparación de dos radares móviles a ser incorporados en el transcurso de este año.
«El Paraguay vuelve a recuperar su soberanía, ese es el Paraguay que nos merecemos, el Paraguay por el que se han jugado nuestros próceres, por el cual han derramado su sangre nuestros héroes del 70, culminando en la sagrada fecha del 1 de marzo que recordaremos en estos próximos días», agregó el Presidente.
Igualmente, señaló que ese es el Paraguay que hoy reivindicamos con nuestra firma determinación de defenderlo a toda costa y a cualquier precio. Sobre el punto, ratificó que cuidarán a capa y espada la seguridad de los paraguayos y paraguayas.
«Por eso le decimos a los criminales, Paraguay ya no será un camino fácil para ustedes, sepan que no vamos a descansar hasta desterrar este tremendo flagelo de nuestra Nación», subrayó.
La compra incluye: Seis modernos aviones súper tucano, cuatro helicópteros donados por Taiwán, la reparación de dos radares móviles, por parte de Israel, a ser incorporados este año.
La compra se realizó a través de un contrato directo entre gobiernos, eliminando intermediarios. La adquisición incluye no solo los sistemas de radar, sino también soporte logístico, programas de capacitación especializada, mantenimiento garantizado y actualizaciones periódicas que aseguran su sostenibilidad a largo plazo.
