La Casa Blanca notificó oficialmente al Congreso sobre el ataque militar del 2 de septiembre en el Caribe y advirtió que podrían venir nuevas acciones.
En la carta, se afirma que cárteles de la droga “extraordinariamente violentos”, designados como organizaciones terroristas por Estados Unidos, han causado la muerte de decenas de miles de ciudadanos estadounidenses y representan una amenaza a la seguridad nacional y a los intereses de política exterior.
Describe que estas redes criminales cuentan con recursos financieros y capacidades paramilitares que les permiten operar con impunidad, ejercer violencia y terrorismo, desestabilizar a otros países del hemisferio y poner en riesgo a EE.UU. Señala que incluso naciones “amigas” han intentado combatirlas, pero han sufrido pérdidas humanas por la violencia.
El informe sostiene que, ante la “incapacidad o falta de voluntad” de algunos Estados de la región para enfrentar la amenaza desde sus territorios, Washington se vio obligado a actuar en defensa propia.
Según el documento, el 2 de septiembre las fuerzas estadounidenses atacaron una embarcación en aguas internacionales, más allá del mar territorial de cualquier país, que fue evaluada como “afiliada a una organización terrorista designada y dedicada al narcotráfico”.
No especifica qué grupo fue atacado ni ofrece detalles adicionales. Reconoce además que aún no es posible saber el alcance ni la duración de las operaciones y que las tropas de Estados Unidos seguirán en posición de continuar acciones militares.
La carta subraya que la acción se ampara en la autoridad constitucional del presidente como Comandante en Jefe y Jefe del Ejecutivo, en línea con la War Powers Resolution, y que el Congreso será mantenido informado.


Fuente: Alerta Mundo News
Discussion about this post