El número de fallecidos en el incendio del complejo residencial Wang Fuk Court de Hong Kong ocurrido el miércoles se eleva ya a 128 mientras se desconoce el paradero de unas 200 personas, informaron este viernes fuentes oficiales.
El secretario de Seguridad de la región semiautónoma, Chris Tang Ping-keung, anunció ante los medios que 108 de los cuerpos fueron hallados en la zona del incendio y no descartó que los equipos que trabajan en los edificios afectados hallen más cadáveres.
Cientos de voluntarios se apresuran a entregar suministros de emergencia a las víctimas del peor incendio de Hong Kong en casi 80 años, clasificando y distribuyendo artículos, desde pañales hasta comida caliente, y ofreciendo asesoramiento gratuito. Los voluntarios han formado equipos para recoger donativos y suministros, organizar el transporte y la distribución de bienes, así como para trabajar en turnos de día y de noche en las labores de ayuda.
Frente al complejo Wang Fuk, dañado por el fuego, los voluntarios han levantado un gran campamento de ayuda para los residentes desplazados, junto a un centro comercial.
Este viernes se levantaron carpas azules y rojas mientras los voluntarios repartían suministros en decenas de cajas de cartón, mientras mapas dibujados a mano en cartulinas mostraban las direcciones para recoger artículos de aseo, ropa de cama, ropa y productos para mascotas. «Esto es participación civil real», dijo Helena, de 22 años, que coordinaba a los voluntarios, y solo dio un nombre.
En la cercana estación de tren de Tai Po, los voluntarios han instalado un punto de recogida de artículos donados, como almohadas, calcetines, botellas de agua y bolsas de basura. Desde allí, los equipos los trasladan a los refugios y a una guardería reconvertida en centro de ayuda y apoyo.
«Hay muchos voluntarios ayudando en los puestos de recursos. Por eso se nos ocurrió esta idea. Les ayudamos a cargar baterías», explica Bosco Pang, de 40 años, que trabaja en la empresa de coches eléctricos BYD.
Pang instaló una estación de carga de baterías externas en la parte trasera de su vehículo. Los residentes del centro financiero asiático también han hecho cola en los centros de donación de sangre para ayudar a los heridos graves, según los medios de comunicación.
El jueves, el dirigente de Hong Kong, John Lee, anunció la creación de un fondo de ayuda de 300 millones de dólares hongkoneses para los residentes de los complejos residenciales, y prometió a cada familia un fondo de ayuda de emergencia de 10.000 dólares hongkoneses. La Oficina china de Asuntos de Hong Kong y Macao dijo que se había coordinado con la provincia meridional de Cantón para enviar rápidamente equipos de rescate y suministros médicos.
Decenas de grupos empresariales y fundaciones benéficas han anunciado donaciones, entre ellas las de los magnates inmobiliarios Li Ka Shing, Lee Shau Kee y empresas inmobiliarias como Hang Lung y Shangri-la Group.
Fuente: EFE
























Discussion about this post