El huracán Milton causó al menos 13 muertos y dejó una senda de destrucción a su paso por el estado de Florida, donde provocó graves inundaciones. Anoche 2,9 millones de usuarios permanecen sin luz, además de causar daños estimados en hasta 60.000 millones de dólares. Sin embargo, autoridades y afectados respiraron con algo de alivio porque pudo haber sido peor, de acuerdo a lo que pronosticaban los meteorólogos.
Milton golpeó el centro de Florida con lluvias torrenciales y fuertes vientos, tras haber tocado tierra la noche del miércoles en la costa oeste del estado como huracán mayor, de categoría 3 (el máximo es 5), y vientos de hasta 205 kilómetros por hora.
Seis de las muertes se produjeron en el condado de St. Lucie, en la conocida como Costa del Tesoro (Treasure Coast), resultado de tornados relacionados con Milton que obligó a emitir 116 avisos de tornado, según declaró el gobernador del estado, Ron DeSantis.
Milton salió de Florida tras atravesar el estado de oeste a este, aunque los expertos advierten que la costa este puede sufrir todavía intensas precipitaciones y marejadas ciclónicas.
Casi 7,3 millones de residentes en quince condados recibieron órdenes de evacuación obligatoria, una evacuación reforzada con el mensaje de que era “cuestión de vida o muerte”, como dijo Joe Biden.
Mientras más de 3 millones de viviendas y edificios se encontraban anoche todavía sin electricidad, las autoridades anunciaron multas de hasta 25.000 dólares a especuladores y crearon una línea telefónica especial para denuncias. La decisión es producto de las alertas de manipulación de precios y acaparamiento de bienes básicos que comenzaron antes de la llegada del huracán.
Milton dejó un estado asolado con graves inundaciones por lluvias, destrozos, muertes y centenares de miles de personas evacuadas, cuando aún intenta recuperarse de los daños de Helene, que entró el pasado 26 de septiembre por el noroeste de Florida como huracán de categoría 4.
Helene dejó más de 230 muertos y decenas de desaparecidos convirtiéndose en el huracán más mortífero en Estados Unidos desde el Katrina en 2005.
Fuente: EFE