La Superintendencia de Salud puso en marcha este lunes el “Operativo Ñemboty”, un despliegue nacional de fiscalización dirigida a clínicas y establecimientos médicos que operan sin la habilitación oficial del Ministerio de Salud o sin registro ante la Superintendencia. El objetivo es regularizar o sancionar a cerca de 100 clínicas que actualmente operan de manera irregular.
El doctor Roberto Melgarejo, superintendente de Salud, detalló que diez equipos de fiscalizadores, con el apoyo de la Secretaría de Defensa del Consumidor y el Usuario (SEDECO) y la Defensoría del Pueblo, se encargan de inspeccionar los establecimientos de salud en todo el país.
Melgarejo expuso que durante el operativo se identificarán dos tipos de entidades: aquellas que están completamente fuera de la ley (sin habilitación del Ministerio de Salud) y las que, aunque habilitadas por el Ministerio, no se registraron ante la Superintendencia, como lo exige la normativa.
“Este operativo es un hecho sin precedentes. Queremos dejar claro que vamos a controlar a todas las entidades que prestan servicios de salud, especialmente aquellas que no están habilitadas para realizar procedimientos específicos”, apuntó.
La iniciativa de fiscalización surge tras el trágico caso de la muerte de una mujer que se sometió a una cirugía estética en una clínica registrada como odontológica, pero que no estaba habilitada para realizar procedimientos quirúrgicos.
La Superintendencia estima que este operativo podría resultar en la clausura de hasta 100 clínicas que no cumplen con los requisitos legales. Melgarejo subrayó que la medida busca proteger la salud de los pacientes y erradicar la operación de establecimientos ilegales que ponen en riesgo la seguridad sanitaria.