Patricia Benítez, madre de una alumna del colegio nacional Naciones Unidas, habló con Radio 1000 sobre una aparente «tragada de plata» en un curso de secundaria que ahorró casi 15 millones de guaraníes para su colación, la cual tuvo que ser suspendida debido a esto. Señaló que tanto la delegada del curso como su padre fueron los responsables.
Recordó que los adolescentes trabajaron bastante para conseguir el dinero, detectándose que este no estaba cuando se hizo una reunión evaluando pagar a una decoradora. La madre de la delegada fue la que informó que ya no contaban con el dinero, esto cuando se lo pidieron simplemente para darle una pequeña seña a la mencionada decoradora.
Los denunciados son Diego Garay y su hija (ya de 18 años) Mónica Garay, así como su madre de nombre Josefina. El padre de la delegada incluso habría dicho a los adolescentes que se comportaban como «muertos de hambre pidiendo dinero», incluso asegurando que él ganaba 35 millones de guaraníes a diferencia de los padres de los alumnos que, según él, ganan «sueldo mínimo».