El doctor Esteban Kriskovich, exembajador paraguayo ante la Santa Sede, en entrevista con Radio 1000 recordó al cardenal Jorge Mario Bergoglio, como un papa que dejó un importante legado: el de volver a los orígenes de la Iglesia para estar cerca de la gente y dejar de lado las apariencias.
Destacó asimismo que siendo jesuita, el pontífice eligiera el nombre de “Francisco”, como un mensaje claro de su opción preferencial de estar cerca de la gente más necesitada y que sufre.
“La cercanía también se vivía en su testimonio, él por ejemplo, en vez de vivir en el Palacio Apostólico, en un tercer piso, quiso vivir en Santa Marta, en un hotel, para estar cerca de la gente”, resaltó.