Luego de cuatro meses, Ramona Jiménez, la joven madre apuñalada 30 veces por su expareja, fue dada de alta luego de recibir un tratamiento médico en el Hospital del Trauma. El agresor ya está detenido.
Fue de mucha angustia y desesperación, pero felizmente para su familia, Ramona ya va su casa para reencontrarse con sus hijos. Todavía se encuentra débil en lo físico, y no es para menos. Seguirá su tratamiento y las curaciones correspondientes.
«Cuídense mucho, no permitan que este tipo de situaciones se apoderen de sus vidas porque mi hermana se salvó y pudo haber sido un número más en la tasa de feminicidios, ella sobrevivió, puede contar la historia, pero fue gracias a que relativamente se salvó a tiempo. Si llegan a tener un episodio parecido, nadie puede tomar sus vidas, sean libre, no permitan que ningún hombre se aproveche de ustedes, sean fuertes y quiéranse mucho sobre todas las cosas», expresó Andrea Jiménez, hermana de Ramona.
La joven había llegado el 4 de enero pasado al Hospital de Trauma, en Asunción, luego de ser trasladada de un centro médico de Itacurubí de la Cordillera, donde fue auxiliada en un primer momento.
El principal sospechoso, Nelson Daniel Montiel Vera (29), se entregó a las autoridades en San José de los Arroyos, de Caaguazú, donde ocurrió el hecho, y ya se encuentra imputado por intento de feminicidio. Está expuesto a una pena máxima de 30 años de cárcel por el ensañamiento con el que actuó.