El primer ministro británico Richi Sunak, presentó el lunes una contundente disculpa a las víctimas y familiares de uno de los peores fracasos sanitarios del país, después de que un demoledor informe revelara que las contaminaciones sanguíneas que mataron a 3.000 personas e infectaron a otras más de 30.000 podrían haberse evitado en gran medida.
“Este es un día de vergüenza para el estado británico”, dijo Sunak a los legisladores en la Cámara de los Comunes, donde presentó una “disculpa sincera e inequívoca” por lo que calificó de fallos reiterados de los funcionarios británicos.
“Lo siento de verdad”, dijo, pocas horas después de la publicación de un informe largamente esperado que identificaba un “catálogo de fallos” a lo largo de dos décadas por parte de funcionarios gubernamentales y médicos británicos, la mayoría de ellos errores evitables que luego fueron encubiertos.
El informe de 2000 páginas es el producto de una investigación de casi seis años que el gobierno británico ordenó en 2017 tras décadas de presión de las víctimas y sus familias.
“El informe de hoy muestra un fracaso moral de décadas en el corazón de nuestra vida nacional”, dijo Sunak. “En todos los niveles, las personas y las instituciones en las que depositamos nuestra confianza fallaron de la manera más desgarradora y devastadora”.
Prometió que el Gobierno pagaría una «indemnización integral» a los infectados y a sus familias, pero dijo que los detalles de esos planes se darían a conocer la próxima semana.
También prometió que el gobierno estudiaría las “amplias recomendaciones” del informe para evitar que se repitan los fallos.
El gobierno británico había acordado en 2022 distribuir a cada víctima un pago provisional de 100.000 libras, unos 127.000 dólares.
Fuente: EFE