El presidente de la República, Santiago Peña, promulgó la Ley N.º 2990, que establece la creación de la Comisión Nacional de Lucha contra la Desertificación y la Sequía (CNLD). Este organismo dependerá de la Dirección General de Protección y Conservación de la Biodiversidad del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES) y actuará como un apoyo estratégico para la Oficina Nacional de Lucha contra la Desertificación y la Sequía.
La CNLD se constituye como un órgano colegiado de carácter interinstitucional, deliberativo y consultivo, que tendrá un rol fundamental en la implementación de políticas y planes relacionados con la desertificación y la sequía. La Comisión cuenta con responsabilidades como acompañar el Plan de Acción Nacional de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, colaborar con la Oficina Nacional para implementar instrumentos de política pública, y proveer recomendaciones sobre los informes nacionales vinculados a la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación. Además, asume el seguimiento del cumplimiento de los preceptos establecidos en dicha Convención y en la Ley N.º 970/1996, y reglamenta su propio funcionamiento.
La Comisión está integrada por 29 instituciones provenientes de los sectores público, productivo, académico, de la sociedad civil y pueblos indígenas, todas vinculadas a la temática de desertificación y sequía. Entre sus objetivos se encuentra el fortalecimiento de la coordinación entre instituciones estatales, agencias internacionales y expertos, buscando reducir los impactos de estos fenómenos sobre el sector productivo y las comunidades locales.
Antes de convertirse en la CNLD, esta instancia operaba como la Mesa de Trabajo Interinstitucional de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, un espacio de colaboración que sirvió como un punto de partida para coordinar iniciativas y avanzar en los compromisos internacionales asumidos por el país.
Su evolución hacia una Comisión Nacional consolida su estructura y funciones, permitiendo un mayor impacto en la gestión de estos desafíos ambientales.
La formalización de esta instancia como Comisión Nacional refleja el compromiso del gobierno de Paraguay, a través del MADES, con los compromisos internacionales asumidos y con la implementación de medidas efectivas para enfrentar la desertificación y la sequía.
Fuente: MADES