Una niña de 4 años llegó en estado grave al Hospital de Trauma después de tragar un collar de perlas metálicas que se desarmó dentro de su boca. Cuatro piezas siguieron el rumbo digestivo, pero una ingresó al pulmón y produjo una neumonía bilateral severa.
El equipo médico decidió intubarla y derivarla al INERAM, donde especialistas realizaron una endoscopía. Durante la exploración encontraron pus en los bronquios y, en la zona más profunda de la base pulmonar, localizaron la perla que desencadenó la complicación respiratoria.
Tras un procedimiento cuidadoso, los profesionales lograron extraer el objeto y volvieron a intubar a la niña para continuar el tratamiento por la neumonía avanzada.
Uno de los médicos señaló que «una sola perla generó un cuadro crítico», resaltando el riesgo que representan los objetos pequeños para los niños.
El trabajo coordinado entre el INERAM, el Hospital de Trauma y SEME permitió estabilizar a la pequeña en un momento límite.
El llamado a los padres es directo: vigilar de cerca a los niños y evitar que manipulen elementos que puedan convertirse en un riesgo respiratorio.
Fuente: Última Hora
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