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lunes, septiembre 16, 2024
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Implicado en crimen de exintendente de Pedro Juan Caballero, se dio por detenido

El comisario Luis López, jefe del Departamento contra el Crimen Organizado de la Policía Nacional, en entrevista con Radio 1000, informó que uno de los hombres buscados por el crimen del exintendente de Pedro Juan Caballero, José Carlos Acevedo, se entregó a la justicia el miércoles luego de permanecer varios años prófugo.

El jefe policial detalló que se trata de Alán Andrés Báez González (25), quien es sindicado como uno de los sicarios que disparó al finado político liberal.

Comentó que el hombre se presentó junto a dos abogados en la Comisaría 1ª de San Pedro de Ycuamandiyú, distrito del que es oriundo. Agregó que el sujeto ya fue puesto a disposición del Ministerio Público y del Juzgado correspondiente.

«Datos técnicos nos confirmaron que el propietario del arma de fuego utilizada para el crimen del exintendente pertenece a Ronny Ayala Benítez (ya detenido), primo de este que se presentó», destacó.

Según López, faltaría solo 1 persona por ser capturada en torno al hecho, específicamente el hermano de Báez González. «Unas 4 personas estarían implicadas en el hecho», refirió.

El ex intendente Acevedo fue atacado por cuatro sicarios el 17 de mayo de 2022, cuando salía caminando de la sede de la municipalidad y se dirigía a su automóvil. El político recibió varios disparos de arma de fuego y murió días después en un sanatorio privado.

Según las pesquisas, Báez González formó parte de los sicarios que atacaron al hombre, tras hacer el seguimiento de una de las armas utilizadas para el atentado, que estuvieron en su poder y en el de su hermano Riki Javier Báez González, quien sigue prófugo. Ambos trabajaron como guardias para la familia de Gregorio Papo Morales.

Los intervinientes llegaron hasta los hermanos tras el estudio de balística que comparó los proyectiles percutidos en el atentado contra Acevedo con los de un incidente de 2017 relacionado a la familia Morales.

El arma que estaba en poder de ambos es una pistola Glock 9 milímetros, pertenecía a Fernando Javier Lezcano, alias Gordo, quien fue asesinado en 2017. Posteriormente, la pistola fue entregada a Mirta Raquel López, quien afirmó haberla dado a la abogada Liz López Peña como parte de pago por sus servicios.

Sin embargo, la abogada negó haber recibido el arma. Ambas mujeres fueron imputadas por transgresión a la Ley de Armas.

Otros involucrados son Ronny Ayala Benítez, alias Alemão, detenido el 4 de julio de 2022 en Encarnación junto a Rodney Ariel Rivarola, que fue capturado el 14 de abril de 2023 en San Pedro del Ycuamandyyú tras un allanamiento.

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