Agentes Especiales de la Senad, con apoyo del CODI y el Ministerio Público, se encuentran tras los objetivos establecidos por la operación, los cuales radican en golpear la cadena de producción y logística de peligrosos grupos criminales con presencia en Canindeyú. En el Operativo Regresión II, lograron sacar de circulación 326 toneladas de marihuana, con ubicaciones entre Corpus Christi, Brítez Cué y alrededores.
El mismo generó un perjuicio económico al crimen organizado que supera los 9 millones de dólares.
La fórmula de acción planificada entre las fuerzas, con apoyo de helicópteros de las Fuerza Aérea Paraguaya, aportó una marcada presencia en la zona que no solo se limitó a la destrucción de 21 campamentos sino también a establecer grupos de patrullajes permanentes.
Los días invertidos en la operación sirvieron para eliminar 107 hectáreas de cultivos ilícitos, la mayoría de estos trabajados por comunidades indígenas que responden a las órdenes de referentes criminales.
En su conjunto, teniendo en cuenta la cantidad de droga destruida y la logística empleada para el procesamiento, el operativo generó un perjuicio económico de 9,7 millones de dólares.
Los fiscales que coordinaron las irrupciones de Regresión en su fase II, fueron Christian Royg e Inés Estigarribia.
Fuente: Secretaría Nacional Antidrogas