El Mercado Común del Sur (MERCOSUR) y la Unión Europea (UE) alcanzaron este viernes un acuerdo de libre comercio tras 25 años de negociaciones.
El histórico entendimiento se concretó en la LXV Reunión Ordinaria del Consejo del Mercado Común y Cumbre de Presidentes de los Estados Partes del MERCOSUR y Estados Asociados, que se desarrolla en Montevideo, Uruguay.
«Este acuerdo es una victoria para Europa. 30.000 empresas europeas ya exportan al Mercosur. Seguirán muchos más. UE-Mercosur refleja nuestros valores y compromiso con la acción climática. Y nuestros estándares de salud y alimentación siguen siendo intocables», expresó la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Se trata de un acuerdo ambicioso, amplio y equilibrado. El Acuerdo UE-MERCOSUR tiene gran importancia para ambas regiones del mundo, desde el punto de vista político, económico-comercial y estratégico.
Al ser MERCOSUR un bloque relativamente cerrado, la apertura concedida a la UE no tiene precedentes y va a generar grandes beneficios. La Comisión Europea estima que, gracias al desmantelamiento acordado, las exportaciones europeas se beneficiarán de un ahorro arancelario de 4.000 millones de euros anuales, lo que representa cuatro veces el ahorro arancelario que ofrece el acuerdo con Japón. El Acuerdo permitirá eliminar numerosas barreras arancelarias y no arancelarias. MERCOSUR liberalizará el 91% de sus importaciones (91% de líneas arancelarias) y la UE liberalizará el 92% de sus importaciones (95% de líneas arancelarias).
El acuerdo supone la eliminación progresiva de los elevados aranceles que se aplican, actualmente, a un gran número de productos agroalimentarios europeos, en los que España tiene intereses comerciales, como el aceite de oliva, vino, frutas y hortalizas o porcino.
En contrapartida, la UE liberalizará el 82% de las importaciones agroalimentarias del bloque de MERCOSUR e impondrá contingentes arancelarios para aquellos productos más sensibles. Se mantendrán los exigentes estándares de seguridad alimentaria europeos, ya que todas las exportaciones de MERCOSUR deberán cumplir con los estos.
Se garantiza la protección de 357 Indicaciones Geográficas de alimentos y bebidas de la UE, de las que 59 son españolas. El acuerdo prevé la posibilidad de aplicación de medidas de salvaguarda bilaterales, si se produjera un incremento repentino de las importaciones en un determinado producto.
En relación con el sector industrial, MERCOSUR eliminará aranceles al 90% de sus importaciones procedentes de la UE, eliminación que se producirá en 10 años para la mayor parte de los productos. Se beneficiarán más aquellos sectores que tienen un arancel más alto, como el automóvil, los bienes de equipo, los productos químicos, los productos farmacéuticos o el textil y calzado.
En materia de servicios, el acuerdo elimina obstáculos en sectores de gran importancia para España, como los servicios financieros y las telecomunicaciones. Destaca también el sector de servicios de transporte marítimo internacional. Se introducen disposiciones en materia de comercio electrónico e incluyen disposiciones respecto a la movilidad de trabajadores de perfil directivo y especialista.
A su vez, el Acuerdo permitirá una notable mejora en el acceso a los mercados de contratación pública de MERCOSUR con carácter no discriminatorio (en las mismas condiciones que las empresas locales). Ello es especialmente relevante si tenemos en cuenta la escasa apertura tradicional de estos mercados y el hecho de que los países de MERCOSUR no son signatarios del acuerdo de la OMC sobre contratación pública.
El Acuerdo incluye un capítulo de Comercio y Desarrollo Sostenible que contiene disposiciones ambiciosas, como el cumplimiento de los compromisos del Acuerdo de París, la lucha contra la deforestación y el respeto a los derechos laborales, entre otros.
Respecto a la revisión y control, las Provisiones institucionales del Acuerdo Político y de Cooperación establecen que las Partes se reunirán para controlar y evaluar la aplicación del Acuerdo y supervisar el cumplimiento de sus objetivos, y el propio capítulo de Comercio y Desarrollo Sostenible establece un foro específico para supervisar la implementación de las disposiciones incluidas en el mismo, incluyendo una publicación de los resultados que se obtengan en el caso de disputas.
Asimismo, con el fin de reforzar los compromisos en sostenibilidad y favorecer el avance y cierre de las negociaciones, la Comisión ha preparado un Instrumento Conjunto adicional sobre sostenibilidad, con carácter vinculante, como complemento al Acuerdo, pero sin reabrirlo.
Este instrumento clarifica y reafirma los compromisos en la lucha contra la deforestación, estándares laborales y cumplimiento del Acuerdo de París, biodiversidad, cambio climático, protección de bosques, derechos humanos (con especial mención a los pueblos indígenas), medidas de cooperación y sociedad civil. La Comisión europea presentó esta propuesta de Instrumento Adicional a los Estados miembros de la UE y a los países de Mercosur en marzo de 2023. Mercosur comunicó una primera contrapropuesta en septiembre de 2023, añadiendo preocupaciones relativas al derecho a regular, ciertas demandas sectoriales y solicitud de cooperación financiera.