Agentes de la SENAD ubicados en zona de Maracaná, Canindeyú, acudieron a un terreno de producción de marihuana preparado para el narcotráfico en el cual fueron levantados campamentos. En los alrededores del lugar fueron localizados más de mil kilos de la droga. Las vigilancias que desembocaron en el operativo estuvieron coordinadas por el fiscal Abg. Néstor Narváez Dávalos
Fueron 3 los campamentos detectados, en los cuales se ingresaban cientos de paquetes con la droga. En dicho sector habilitado por grupos que responden a las órdenes de estructuras criminales fueron destruidos al menos 1 mil 300 kilos de la hierba.
Otros enseres destruidos fueron prensas hidráulicas, trituradoras y forrajeras, y al mismo tiempo se detectaron caminos que estaban siendo utilizados para el ingreso y salida de las cargas ilícitas hasta el monte. Los responsables del operativo manejan informaciones que se dirigen a la utilización de grupos indígenas como mano de obra para el narcotráfico con unión en otros delitos.