Agentes Especiales de la Secretaría Nacional Antidrogas, con el fiscal Alfredo Manzur, allanaron una propiedad ubicada en la compañía Mbatoví de Paraguarí que funcionaba como «Santuario Holístico de Medicina Ancestral» desde la cual se comercializaba Ayahuasca, que es una potente sustancia psicoactiva alucinógena de origen natural, cuyas propiedades farmacológicas no están probadas.
Durante la intervención fueron incautadas 30 botellas de 500 ml. que contenían ayahuasca concentrada; 50 goteros con la misma sustancia y 3 balanzas de precisión.
Los elementos incautados fueron derivados al Laboratorio Forense Especializado de la SENAD para su análisis riguroso.
El responsable del lugar fue identificado y convocado a indagatoria por parte del agente fiscal, a la espera de los resultados laboratoriales. Según datos recabados, desde el recinto ubicado en una zona despoblada de Paraguarí se ofrecían experiencias y rituales de sanación física y espiritual teniendo como centro el consumo de la sustancia psicoactiva mencionada. Incluso contaban con servicio de delivery para los alrededores y el Departamento Central.
El operativo surgió en base a una denuncia realizada por personal del Ministerio de Salud que tuvo conocimiento de personas que pagaron por la «experiencia» y posteriormente sufrieron crisis de sicosis e intoxicación, que incluso fueron internadas en Urgencias Psiquiátricas del Hospital de Clínicas.
La Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria ya había alertado en su momento que los productos que contengan DMT pueden provocar alucinaciones visuales, auditivas, despersonalización, alteraciones en la percepción y un sentido alterado del tiempo. También está asociada al aumento de la tensión arterial y frecuencia cardíaca, agitación, convulsiones, dilatación de pupilas, náuseas, mareos, entre otras.